Los consumidores de hoy en día, cada vez más empoderados, exigen acceso instantáneo a sus bancos, pero es un desafío estar en todas partes para todos. Al utilizar la inteligencia de ubicación, los bancos de élite están superponiendo datos de movimientos humanos con datos de transacciones de clientes para pronosticar con precisión las ubicaciones ideales de los cajeros automáticos para que puedan estar en el lugar correcto en el momento adecuado.